Parece que la industria musical se ha decidido por apoyar a bandas con mujeres como protagonistas, y no estoy hablando de pop dulzón, sino más bien de mujeres “con los pantalones bien puestos”, con una perspectiva distinta de lo que es el rock, aunque no nueva. Siempre han existido bandas de dicho perfil, aunque nunca se ha presentado en forma de fenómeno que resalta, no sólo en el aspecto cualitativo, sino también en el cuantitativo. Betty and the Werewolves es la nueva propuesta llegada desde Inglaterra, una banda que combina el punk con las melodías pop.
El disco debut se llama “Teatime Favourites”, un título que bien podría considerarse femenino, aunque las canciones que se encuentran en dicho álbum tienen más de Red Bull que de Pickwick tea. Así que no se dejen llevar por la portada, es un malicioso MacGuffin. Las melodías pop hacen disfrutable la escucha, las armonías femeninas endulzan el garabato salido de la guitarra, que se caracteriza por la intensidad. Sin embargo, no es el típico álbum lleno de bulla, sino que sorprende por las variantes ocurridas en su intensidad y detalles. Las catorce canciones transcurren sin que nos percatemos, y eso es buena señal. “I don’t want dinner and movie, I just want someone who will move me”, dice Laura McMahon con toda la frescura del mundo. No les dije que tienen los pantalones bien puestos.
Teatime Favourites
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